Fanzines y libros
La epilepsia del cielo
Joris-Karl Huysmans
Crónicas, prosas y críticas de arte (1867-1902)
Selección y traducción de Claudio Iglesias.
Editado por Ivan Rosado
Exponente máximo del decadentismo francés, amante de los gatos y del tabaco negro, Joris-Karl Huysmans fue un escritor malhumorado con la vida, pero lleno de cariño por la literatura y el arte. Vivió en París entre 1848 y 1907 y allí escribió sus estudiadas novelas, entre las que se destaca la célebre À rebours, de 1884.
Huysmans era un particular observador de la ciudad y eso aparece con fidelidad en sus escritos para revistas y diarios. Al leer sus crónicas, uno es testigo de la guerra entre el presente y el pasado, cuyo campo de batalla era el París en vías de modernización. Como crítico de arte, Huysmans practicaba por igual la derisión cáustica y el encomio desenfrenado. Le corresponde el binomio de Baudelaire: se movía entre el spleen y el ideal en la búsqueda paciente de las piedras preciosas del arte moderno.
Esta antología recorre su producción paralela a la novelística: sus analíticos poemas en prosa, sus crónicas urbanas de adjetivación elaborada y sus vibrantes reseñas y ensayos críticos, publicados entre los años 1867 y 1902.
La epilepsia del cielo
Joris-Karl Huysmans
Crónicas, prosas y críticas de arte (1867-1902)
Selección y traducción de Claudio Iglesias.
Editado por Ivan Rosado
Exponente máximo del decadentismo francés, amante de los gatos y del tabaco negro, Joris-Karl Huysmans fue un escritor malhumorado con la vida, pero lleno de cariño por la literatura y el arte. Vivió en París entre 1848 y 1907 y allí escribió sus estudiadas novelas, entre las que se destaca la célebre À rebours, de 1884.
Huysmans era un particular observador de la ciudad y eso aparece con fidelidad en sus escritos para revistas y diarios. Al leer sus crónicas, uno es testigo de la guerra entre el presente y el pasado, cuyo campo de batalla era el París en vías de modernización. Como crítico de arte, Huysmans practicaba por igual la derisión cáustica y el encomio desenfrenado. Le corresponde el binomio de Baudelaire: se movía entre el spleen y el ideal en la búsqueda paciente de las piedras preciosas del arte moderno.
Esta antología recorre su producción paralela a la novelística: sus analíticos poemas en prosa, sus crónicas urbanas de adjetivación elaborada y sus vibrantes reseñas y ensayos críticos, publicados entre los años 1867 y 1902.